Alexander Arroyave, Kevin Naranjos Salazar y Andrés Naranjos Liscano, fueron los jóvenes asesinados en el Distrito de Mala en la Provincia de Cañete al sur de Lima Perú, fueron atacados a bala por sicarios que se movilizaban en motos y sorprendieron a las víctimas cuando estaban conversando en un sector denominado como Jirón Puno en la ciudad limeña.
Según la información las víctimas colombiana se habían desplazado al Perú para dedicare al trabajo de prestamistas en la modalidad de gota a gota en los que cobraban altos intereses, al lado de los cuerpos dejaron un letrero escrito sobre cartón que decía “Esto es para que todos los gotas respeten el sistema».
Las autoridades peruanas indicaron que se trató de un enfrentamiento por la lucha territorial que tienen Los Gallegos una banda delincuencial de Venezuela que haría parte de un brazo armado de “El Tren de Aragua”.
Este tipo de homicidios son frecuentes no solo en Perú, sino en México, Brasil Argentina, Ecuador. Se conoció que la banda criminal venezolana Los Gallegos seria la que se encargaba del cobro de cupos o préstamos a los comerciantes, las trabajadoras sexuales y los transportadores de Perú.